Periodistas y redactores gráficos se han concentrado en plaza Catalunya de Barcelona convocados por varios sindicatos y entidades asociativas del sector para hacer patente la indignación ante las agresiones sufridas por los cuerpos policiales mientras informaban durante las revueltas de los últimos días en Catalunya.

En un manifiesto, han dejado patente que «se están vulnerando sus derechos». Han explicado que «nuestra insistente y reiterado llamamiento para que se detengan las agresiones a los profesionales de la información va mucho más allá de una reivindicación corporativista», dijeron. En este sentido han afirmado que la protesta “es un grito de alarma ante el deterioro de la libertad de expresión y la libertad de prensa».

Los concentrados han explicado que el periodismo tiene la función social de hacer llegar a la ciudadanía la información necesaria para ser libre y formarse un criterio sobre los asuntos públicos. «Cada vez que alguien obstaculiza el trabajo de una periodista está atentando contra el sistema democrático», afirma el comunicado.

La cifra de 65 periodistas que han sufrido agresiones la última semana mientras hacían su trabajo «es absolutamente intolerable» han manifestado. Los informadores rechazan todas y cada una de las acciones mencionadas vengan de donde vengan, porque «suponen un ataque al derecho a la información de la ciudadanía». Sin embargo, los periodistas destacan que las agresiones «son especialmente graves cuando provienen de servidores públicos».

Por tanto, las entidades convocantes del acto han reprobado “especialmente la actuación de los cuerpos policiales, tanto de los Mossos, como de la policía nacional”, y es que en la mayoría de los casos, las informadoras y informadores iban perfectamente identificados como periodistas. “La arbitrariedad de estas acciones policiales hace pensar que estas agresiones tienen como objetivo intimidar a los y las periodistas”. El objetivo de las agresiones sería, afirman, evitar que los periodistas sean testigos de los abusos que se puedan cometer.

En otro punto se reclama, tanto a la conselleria de Interior de la Generalitat como al ministerio español de Interior que investiguen los hechos y depuren las responsabilidades que procedan. Asimismo se exige que desde las respectivas administraciones se garanticen que los y las profesionales de la información puedan trabajar en la calle sin trabas y sin temer por su seguridad. Para hacerlo posible, las entidades que han hecho el manifiesto se ofrecen para formar los cuerpos policiales sobre las obligaciones de los funcionarios públicos para garantizar el derecho a la información de la ciudadanía y para evitar que estas situaciones se repitan en el futuro.

Siete de cada diez agresiones han sido perpetradas por policías

Los profesionales de la información han reprobado la detención del fotoperiodista de El País, Albert García, la noche del viernes por parte de agentes de la Policía Nacional. “Es totalmente inadmisible”. También reclaman al conjunto de la ciudadanía y los participantes en las manifestaciones y protestas, «que respeten nuestro trabajo para poder garantizar sus derechos democráticos».

Otro punto indicado en el manifiesto es remarcar que una cosa es la línea política de los medios informativos y otra muy diferente es el trabajo que hacen los trabajadores a pie de calle. Por ello se insta al público, administraciones y ciudadanía a discernir una cosa de la otra y en caso de que tengan queja de la línea de un medio utilicen los mecanismos que existen, en Catalunya el Consejo de la Información, que vela por la deontología del periodismo en el país.

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