Pere Aragonés ha decidido renovar casi al completo el equipo de la anterior legislatura. La mayoría (8 de 14) son mujeres. Del total, sólo tres repetirán: Jordi Puigneró, vicepresidente y consejero de políticas digitales e infraestructuras, Teresa Jordà, consejera de acción climática, agricultura y alimentación, y el mismo presidente Aragonés. El resto son los siguientes: Laura Vilagrà (ERC) conselleria de Presidencia, Jaume Giró (Junts) Economía, Victoria Alsina (Junts) acción exterior, relaciones institucionales y transparencia; Joan Ignasi Elena (ERC) se hará cargo de interior, mientras que Natalia Garriga (ERC) lo será de cultura, Lourdes Ciuró (Junts) lo será de Justicia, Violant Cervera (Junts) de derechos sociales, y Tania Verge de feminismos.
Lee aquí los perfiles de los consejeros de sanidad (Junts por Catalunya – Josep Maria Argimon), educación (ERC, Josep González Cambray), empresa y trabajo (Roger Torrent, ERC)
Los indultos: una posible batalla entre Junts per Catalunya y ERC
En las próximas semanas se esperan noticias respecto de los indultos a los presos políticos. Es conocido que detrás de la posibilidad de que estos otorguen hay una lucha por el relato dentro del independentismo. Junts por Catalunya ha basado parte de su campaña en criticar la estrategia negociadora de ERC con el estado, lo que también ha hecho la CUP, que quiso dejar constancia en el pacto con ERC que no creían que la mesa de diálogo pudiera llevar ningún beneficio.
Pero, si los indultos llegan, ¿no debería de ser un motivo de alegría para toda aquella gente que cree que no deberían estar en la cárcel? La cuestión es indicativa de hasta qué punto la lucha por el voto puede llevar a las formaciones políticas a tener que hacer ejercicios de contracción imposibles. Porque si los indultos llegan es indudable que habrán llegado gracias a la interferencia de Podemos – sobre todo de los diputados de En Común Podem -, y de la gestión de Esquerra Republicana de Catalunya. Los indultos serán resultado directo de la mesa de diálogo. Al mismo tiempo, sin embargo, en caso de llegar estos, serían la confirmación por parte de Junts que ERC se ha convertido lo que ahora les critican ser: un actor capaz de dialogar con Madrid. Junts no puede no alegrarse por la liberación de miembros de su propio partido político, pero a la vez tampoco puede alabar la gestión que lo ha hecho posible. Ahí está el problema.
En todo caso, de darse tal noticia representaría un punto crucial para la política catalana en general, y es de esperar que obligue a Junts por Catalunya, un partido que aún no ha encontrado su identidad, a planteársela seriamente.
Los fondos europeos: 30.000 millones de € en manos del Gobierno
Si no fuera suficiente con la excepcionalidad de la covid19 y del conflicto territorial – explicitado en esta legislatura con el indulto a los presos políticos -, hay un último factor que tendrá un peso especial en los próximos años: la gestión de los fondos europeos. El cálculo aproximado es que Catalunya tendrá unos 30.000 millones de euros extras a gestionar provenientes de los fondos europeos “Next Generation”, que deben poder dar una respuesta con políticas económicas expansivas a la crisis económica de la covid19.
Las primeras filtraciones del nuevo gobierno de Pere Aragonès apuntaban a que la gestión de los fondos europeos estarían en manos de Junts per Catalunya, pero esta información no es del todo cierta. Para decidir sobre la dirección e implementación de los fondos se ha conformado el Comité Asesor Catalunya-Next Generation EU (CONEXTRAN CAT-EU) que está formado por un presidente (el actual vicepresidente de la Generalitat y principal cargo juntos en el gobierno, Jordi Puigneró) por un vicepresidente, en manos de Roger Torrent, consejero de empresa, y por un coordinador, papel que asume el economista y ex-número 3 de la lista de ERC en el ayuntamiento de Barcelona, Miquel Puig.
Por lo tanto, si bien es cierto que el máximo responsable de la comisión será de Junts per Catalunya, pero no los otros dos restantes. Además, a parte de las tres personas citadas, también se añadirá un grupo de doce expertos en diferentes materias económicas que deberán complementar la tarea de analizar los potenciales proyectos a los que se destinarán los fondos.
Para poner en perspectiva la importancia de los fondos, hay que tener en cuenta que los ingresos de la Generalitat en el año 2019 no llegaron a los 25.000 millones de €, cinco mil menos de los que se recibirán en el contexto de Conextran CAT-EU. Por lo tanto, hay dos motivos para anticipar una cierta conflictividad en la gestión de los fondos. El primero es la gran cuantía de estos: unos fondos que tienen un presupuesto similar al de la propia Generalitat implica inevitablemente una lucha en la decisión del uso sobre los mismos. Y un segundo motivo: a diferencia de las consejerías, que acaban actuando de manera independiente las unas de las otras y por tanto no se producen debates interpartidistas, en el seno de la comisión será tan representantes de Juntos como de ERC, lo que puede hacer avivar la llama ya viva del conflicto entre Junts y ERC.


