La sexta ola se agrava en Cataluña. Los contagios y los ingresos aumentan y, según el Departament de Salut, más del 20% de los casos en Catalunya son sospechosos de ser de la nueva variante ómicron, un porcentaje que ya es del 25% en la ciudad de Barcelona. Salut prevé que ómicron sea la variante dominante antes de las fiestas navideñas. La situación preocupa especialmente de cara al inicio de estas fiestas, en las que se producirá un aumento de la interacción social.

En las últimas semanas la situación epidemiológica ha empeorado bastante y las previsiones indican que el número de contagios seguirá al alza. Las causas son diversas: la llegada del frío y el aumento de las interacciones sociales en espacios cerrados, una ventilación insuficiente, la nueva variante ómicron o el relajamiento general de la población, entre otras, podrían haber propiciado este empeoramiento de la situación. Sin embargo, la obligatoriedad del llamado pasaporte Covid para acceder a determinados establecimientos y actividades ha hecho que se haya acelerado el proceso de vacunación de personas que todavía no lo habían hecho.

Los datos que suministra diariamente la Agència de Qualitat i Avaluació Sanitària de Catalunya indican que los casos positivos en Cataluña superan, en los últimos días, los más de 6.000 casos diarios, una cifra que no se había alcanzado desde mediados de julio pasado, en medio de la quinta ola de la pandemia. Los casos positivos de Covid confirmados en Cataluña en una semana se han duplicado y han pasado de los casi 14.000 en la última semana de noviembre (del 24 al 30) a los más de 30.000 en la segunda semana de diciembre (del 8 al 14), y que ya son 34.000 en los datos del sábado 18. Según los datos del Departamento de Salud, durante la primera quincena de diciembre la incidencia acumulada en 14 días ha pasado de 304 a 628, es decir, un crecimiento de más del 100% en poco más de quince días. El sábado 18 de diciembre el riesgo de rebrote estaba en 1.132 cuando el pasado 30 de noviembre se situaba tan sólo en 396. Igualmente, la Rt ha pasado en esta quincena de 1,33 a 1,73. Esto ha impactado directamente en la atención primaria y en el número de pruebas de test de antígenos y de PCR, así como de casos confirmados y también ha empezado a tensionar a los centros hospitalarios de toda Cataluña.

«Hace unas semanas que los contagios y los ingresos están subiendo, aunque de forma más moderada si lo comparamos con otras oleadas. Pero cuando van subiendo de forma constante, al final llegamos a situaciones complejas, y ahora estamos a las puertas de esto. Prevemos que antes de Navidad superaremos los 400 ingresos en UCI, por tanto, la situación será bastante preocupante», señala Daniel López, investigador del grupo de investigación en Biología Computacional y Sistemas Complejos (BIOCOM-SC) de la UPC.

Y, a más contagios, mayor presión al sistema sanitario. Donde primero se ha notado el aumento de la presión asistencial ha sido en la atención primaria, que cada vez recibe más demandas de atención por sintomatología de Covid-19. «Hemos visto que se ha multiplicado muchísimo el número de test que hacemos y de cuidados a pacientes leves. La mayoría de gente que atendemos es gente joven, vacunada o no, con sintomatología leve. Nos vienen con una sintomatología propia del resfriado, a la que en otro contexto no le daríamos importancia, pero que en este caso nos obliga a hacer una prueba para descartar que sea Covid», explica Nani Vall-llosera, médica del CAP del Bon Pastor y miembro del Fòrum Català de la Atenció Primària.

Vall-llosera destaca que la atención primaria se encuentra en un momento de mucha presión, debido a que coincide la Covid con otros virus respiratorios. «Lo que ocurra en los próximos días será clave para saber cómo evoluciona esta sexta ola. De momento, no es una ola comparable a la que vivimos el pasado verano, pero nos encontramos en un momento crítico, porque no sabemos si esta situación se disparará o conseguirá controlar», afirma.

Aumentan los ingresos en planta y UCI

Los ingresos en las plantas de hospitalización y en las unidades de cuidados intensivos también van al alza. El pasado sábado, había 1.144 personas ingresadas en los hospitales catalanes, un 30% más que hace una semana, y 306 en las UCI. El director del Instituto Respiratorio del Hospital Clínic, el Dr. Joan Ramon Badia, señala que este hospital comienza a verse tensionado por el aumento de ingresos, especialmente en las unidades de cuidados intensivos e intermedios. A esto se añade el hecho de que falta, sobre todo, personal de enfermería para atender a estos pacientes complejos. «Hace unas tres semanas que hemos notado el aumento de los ingresos, no de manera exponencial, pero sí hemos tenido un goteo de casos que ha ido sumando cada día a un paciente más a cuidados intensivos y, por tanto, ahora tenemos cierta presión asistencial», apunta Badia. Por el momento, en el Hospital Clínic no se han tenido que desprogramar intervenciones quirúrgicas ni ninguna clase de actividad aplazable, pero sí que se ha reducido el régimen de visitas a pacientes hospitalizados.

El perfil de los pacientes ingresados ​​en los hospitales ha variado algo respecto a otras oleadas, siendo ahora la media de edad más baja. Asimismo, la mortalidad ha disminuido drásticamente. “Las personas vacunadas que ingresan con Covid tienen mucho mejor pronóstico, evolucionan más rápidamente y su estancia en el hospital es más corta de media”, señala Badia. En cuanto a los pacientes ingresados ​​en la UCI, el perfil corresponde prácticamente en un 80% a personas no vacunadas de edad media. «Los pacientes que tenemos que sí se han vacunado son pacientes muy mayores o con otras comorbilidades y enfermedades que hacen que la vacuna genere una menor inmunización», sostiene.

Los datos evidencian, por tanto, el gran impacto de las vacunas en cuanto a la disminución de la gravedad de la enfermedad. «Estamos convencidos de que si no tuviéramos esa tasa tan elevada de vacunación estaríamos mucho peor que en cualquiera de las otras oleadas», sostiene el médico especialista en neumología. En este sentido, Badia remarca que la vacunación de los niños es importantísima. «Afortunadamente, es muy excepcional que un niño sufra enfermedad grave por Covid, pero con su vacunación podemos evitar contagios en personas que sí son más susceptibles de tener cuadros más graves de Covid». Sin embargo, los efectos de la vacunación de los niños, que se inició la semana pasada, no se verán hasta dentro de unas semanas.

La amenaza de la variante ómicron

La existencia de la variante ómicron se anunció el 24 de noviembre, tras detectarla en muestras recogidas entre el 12 y el 20 de noviembre en Suráfrica. Por el momento, la nueva variante se encuentra en estudio y todavía no se conocen a ciencia cierta los efectos que puede tener para los sistemas de diagnóstico, tratamientos y vacunas. Lo que sí se sabe es que la variante ómicron es más transmisible que la delta y que tiene aproximadamente 100 mutaciones, el doble que la anterior. La gran incógnita sigue siendo la severidad de esta variante.

Òmicron se está expandiendo rápidamente por Europa, y en España comienza a dejar huella, aunque la variante delta sigue siendo todavía la predominante. «Òmicron acabará siendo la mayoritaria, lo que no sabemos es exactamente cuándo. Pero, viendo comportamientos en otros países como Dinamarca, lo que sí sabemos es que, cuando lo sea, el crecimiento en cuanto a número de casos será muy rápido», sostiene el investigador de BIOCOM-SC, Daniel López.

Por este motivo, el investigador señala la importancia de disminuir la incidencia actual del virus y las ocupaciones de camas en los hospitales para que cuando se extienda plenamente la nueva variante el sistema tenga capacidad de reacción. «Si nos engancha con los CAP saturados y las camas de planta y UCI llenas, será una situación insostenible. No sabemos todavía el efecto claro de la variante ómicron, tenemos todavía muchos interrogantes, pero, en cualquier caso, hay que prepararse para afrontar la situación con el mayor éxito posible», remarca.

El descubrimiento de nuevas variantes del coronavirus pone, de nuevo, sobre la mesa la necesidad de que las vacunas lleguen a todos los países del mundo. De hecho, según datos de la web Our World in Data, un 53,9% de la población mundial ha recibido al menos una dosis de vacuna, pero en los países con bajos ingresos sólo se ha administrado al menos una dosis al 5,6% de los habitantes. El hecho de que haya países a los que todavía no hayan llegado las vacunas facilita que el virus circule más y tenga la posibilidad de mutar y generar variantes más contagiosas. «No hay que olvidar que la Covid es una pandemia global, y si no se consigue que las vacunas lleguen también a las poblaciones empobrecidas, no conseguiremos avanzar hacia el fin de la pandemia», afirma López.

Llamamiento a la prudencia de cara a las fiestas de Navidad

Ante el aumento de los contagios e ingresos, los expertos urgen a extremar las precauciones durante las fiestas navideñas, durante las cuales se producirá un aumento de la interacción social. «Ha de extremarse la prudencia. Si no se toman medidas para disminuir la interacción social, después de las fiestas tendremos inevitablemente una aceleración del número de contagios. Si no hacemos nada para reducir los contagios, vamos por mal camino», apunta Daniel López. Según el investigador de BIOCOM, las medidas actuales para reducir los contagios son claramente insuficientes, pues no se ha logrado frenar la expansión del virus. «Habrá que ver el efecto del pasaporte Covid y de la tercera dosis de refuerzo, que en otros países como Dinamarca se ha visto que han hecho desacelerar el ritmo de contagios, pero no ha sido suficiente para frenar el aumento», cuenta López.

Por su parte, el Dr. Joan Ramon Badia apunta que, de cara a los encuentros familiares, si las personas están vacunadas y se realizan un test de antígenos se podría minimizar el riesgo. «Pero, personalmente, si hay familiares no vacunados o personas vulnerables con enfermedades crónicas. me pensaría dos veces hacer un encuentro de este tipo y, en este caso, no lo haría», expresa. Badia anima a vacunarse a las personas que no lo hayan hecho todavía y también anima a los padres a que vacunen a sus hijos, porque «la vacunación nos ayudará a sacarnos de encima esa pesadilla con la que llevamos inmersos desde hace tanto tiempo, no sólo los sanitarios sino toda la población».

Este agravamiento de la situación epidemiológica llega en un momento en el que la atención primaria ha recuperado su ritmo habitual y ha aumentado las visitas presenciales, aunque muchas siguen siendo todavía telefónicas, y en algunos CAP la situación es complicada. «Hay centros que tienen profesionales de baja o que por razones de edad o patologías de base no pueden visitar a pacientes Covid, por tanto, solo visitan pacientes con síntomas respiratorios un número limitado de enfermeras y médicas», explica Nani Vall-llosera .

«Vamos haciendo frente a las sucesivas oleadas sin un refuerzo de personal. Faltan manos y vemos que no hay músculo suficiente. Se siguen haciendo contratos de seis meses a enfermeras y médicas, de tres meses a administrativos… eso no atrae a la gente. Faltan profesionales, sí, pero para eso es necesario mejorar las condiciones laborales, ofrecer perspectivas de futuro», remarca Vall-llosera. «Si no se refuerza estructuralmente la atención primaria, esa situación es cíclica. Los profesionales no somos chicles que se puedan estirar hasta el infinito», concluye.

Share.
Leave A Reply