Después de tres años y 28 reuniones desde que Nissan anunció cerrar las fábricas de Barcelona, la reindustrialización culmina con la firma del arrendamiento de los terrenos. Han sido adjudicados a la empresa inmobiliaria y logística Goodman y el hub de elektromovilidad formado por QTev y BTech, que producirán furgonetas y pick ups eléctricas, ahora sólo quedará pendiente la reincorporación de la plantilla.
De los 500.000 metros cuadrados, el hub utilizará 300.000, mientras que Goodman explotará 100.000. Nissan conservará 38.000 para el centro técnico, la única instalación que mantiene. Los 68.000 metros restantes los ocupa la empresa de scooters y pequeños coches Silence donde trabaja desde julio. Tras la reciente firma del contrato, Goodman es el arrendador.
650 trabajadores por recolocar
El próximo paso será la recolocación de los ex trabajadores de Nissan, que siguen sin trabajo y dejarán de cobrar la prestación por desempleo a finales de año. De los 2.525 trabajadores, descontados los 287 del centro técnico que se mantiene; 1.100 accedieron a prejubilaciones y casi 1.400 esperaban ser recolocados, 60 encontraron una alternativa y otros 60 fueron contratados por Silence. El hub se ha comprometido a contratar a 600 personas en 2023, por lo que quedarían 650 personas que todavía no tienen una solución. Algunas de las propuestas son contratos voluntarios de media jornada o realizar trabajos que hasta el momento estaban subcontratados, al menos en una primera etapa. Según las previsiones de QTev y BTech en 2025 fabricarán 100.000 vehículos y quieren disponer de una plantilla de 1.000 trabajadores.
Pero pese al optimismo de las instituciones, los sindicatos advierten que “toca seguir trabajando para velar por el cumplimiento de lo pactado. Garantizar la actividad industrial y el mantenimiento del empleo será nuestra máxima prioridad y no pararemos hasta conseguir cumplir ambos objetivos”, esgrimen desde USOC.
CCOO pide que se aceleren las contrataciones y afirman que “no daremos la reindustrialización por cerrada hasta que se hayan contratado a todos los trabajadores y trabajadoras”. Desde UGT reivindican el trabajo de los sindicatos en el proceso y reclaman “sacar adelante los acuerdos y formalizar las contrataciones”.
El consejero de Empresa y Trabajo, Roger Torrent asegura que “la culminación del proceso de reindustrialización de Nissan refuerza la apuesta por seguir manteniendo una industria de la automoción referente al sur de Europa, ahora adaptada al reto de la movilidad verde, imprescindible para hacer frente a la emergencia climática”. El proyecto permitirá la cobertura de los puestos de trabajo perdidos por el cierre de Nissan en Barcelona y garantizar su continuidad industrial con proyectos de movilidad sostenible.
El sector de la automoción es protagonista en la economía catalana con 150.000 empleos entre directos e indirectos y factura 25.000 millones de euros, más de un 10% del PIB del país.