El mito fundacional de la literatura occidental, la Odisea de Homero, es el eje vertebrador del Festival de Aviñón 2019 en una conexión entre pasado y presente y aquellas tragedias que nos persiguen de forma cíclica. Ahora, en un Mediterráneo cementerio de migrantes y desposeídos. Están las obras originales o inspiradas por este texto clásico, y las que radiografían el actual malestar de Europa y las corrientes políticas xenófobas que levantan muros contra los parias de otros continentes.
Pero Ulises también llega a la Amazonia para encontrarse con los indígenas a quien Bolsonaro les está arrebatando unas tierras en beneficio de los grandes terratenientes y las corporaciones. Una lucha artística para que las ideas sean un patrimonio para construir y no para destruir, y donde los primeros días hizo una aparición autocrítica en una obra el expresidente francés François Hollande. Hasta el 23 de julio, el director del certamen Olivier Py invita a este ejercicio con una cuarentena de espectáculos oficiales entre los cuales está el del chino Meng Jinghui que nos dejó atónitos con La casa de té.