El festival de Cine y Derechos Humanos de Barcelona cumple 15 años y lo hace bajo la mirada de Derechos y Acción y con la colaboración de la Fundació Periodisme Plural. Aparte de reproducir más de 100 filmes divididos entre ficción y no ficción, documentales, cortometrajes y largometrajes, también están elaborando clases magistrales y mesas redondas con ponentes excepcionales. Siempre con los Derechos Humanos en el centro, el Festival se está llevando a cabo desde el 15 y hasta el 23 de noviembre en los cines Texas y Maldà, en varias facultades y siete centros penitenciarios.
Como ya explicábamos en este diario, “el festival no sólo propone sentarse y mirar; también quiere que los asistentes escuchen, piensen y participen”. Y por eso, muchas de las proyecciones vendrán acompañadas de mesas redondas y cinefórums. Este fue el caso del encuentro para discutir en torno al cambio climático que se celebró a principios de semana en la Sala de Actos del Hospital de Sant Pau con el documental Joanna Macy and the great turning.
El documental, de Estados Unidos, captura la crisis y la posibilidades existentes hoy en día. En la web del Festival definen The Great Turning como “un despertar global a la enfermedad de nuestro planeta, nuestro amor por la vida y la revolución que puede sanear nuestro mundo”.
Con la mesa redonda ‘Cambio climático, cambio de cosnciència’ posterior al film, los participantes quisieron analizar la “situación crítica en la que el desarrollo industrial de la cultura occidental ha llevado al planeta”. El análisis se hizo después del visionado del documental que, a través de una entrevista con la ecofilósofa y activista medioambiental Joanna Macy, se introducen los problemas a los que se enfrenta el mundo en la actualidad y las alternativas que podemos aportar tanto individualmente como a nivel administrativo público y privado.
El debate constó de las exposiciones de varios proyectos por parte de los ponentes pero partiendo y relacionado todo también con la propuesta de Macy que habla de cambios en el modelo económico y social, en nuestro sentir en la red de la vida y la órbita existencial y espiritual del ser humano desde la ecología profunda, la interculturalidad y la ecopsicologia y la esperanza activa.
Daniel Turon, ecopsicólogo y ecofilósofo, introdujo la mesa en este sentido explicando que para enfrentar los cambios tenemos que ver la realidad. Así, tomando palabras de Macy, explicó los tres ejes fundamentales para el cambio:
- El eje de protección de la naturaleza: donde hay acción directa pacífica y podemos ver el mapa de los conflictos climáticos. Aquí es donde los movimientos sociales se implican en la defensa del territorio y en ser garantes de los cumplimientos del protocolo de París. Los movimientos sociales son, poéticamente hablando, los guardianes de la tierra.
- El eje del cambio de paradigma: implica un cambio en la cosmovisión para cambiar los hábitos y salir del androcentrismo.
- El eje de la construcción colectiva: donde están ya habiendo muchos cambios, como en el mundo de la economía con las finanzas éticas.
Turon se acompañó de tres ponentes provenientes de ámbitos muy diferentes. Por un lado, Irma Ventayol, coordinadora del Plan Clima Barcelona del Ayuntamiento, un plan que ha sido premiado como el mejor Plan de las grandes ciudades europeas. También contó con Victoria Sacco, coordinadora de proyectos de Quo Artis, una fundación internacional sin ánimo de lucro que produce proyectos artísticos y científicos en condiciones extremas y de gran complejidad. Su último proyecto se realizó durante el Bienal de la Antártida. Por último, el tercer ponente invitado en la mesa fue Luigi Carafa, director ejecutivo de Climate Infraesturcture Partnership (CLIP), una plataforma internacional para la cooperación “público-privada-sociedad civil” en infraestructura sostenible.
