El 16 de enero, un mes y medio después de que Metges de Catalunya (MC) y la CGT junto con Rebelión Primaria convocaran una huelga en la sanidad que, en promedio alcanzó el 70% de seguimiento, llegaba la convocatoria de una nueva huelga de médicos. Esta vez, sólo enfocada a los facultativos de la red de sanidad concertada englobada dentro del SISCAT, la huelga debía comenzar hoy lunes 18 de febrero y alargarse, como la última, durante cinco días.

Metges de Catalunya denunciaba mientras informaba sobre la nueva huelga que los facultativos de los hospitals y la primaria concertada no habían recibido “ninguna mejora tangible más allá de una pequeña mejora retributiva”. Al mismo tiempo, la convocatoria se planteaba con un mes de margen para dar espacio a las negociaciones. MC ya daba a entender entonces que la huelga no se acabaría celebrando. El mensaje que transmitían era que esta voluntad respondía a su deber con la población. Xavier Lleonart, vicesecretario general de Metges de Catalunya, decía entonces que “la población no son rehenes y no la queremos perjudicar”. Sin embargo, desde el sindicato entendían que la única forma para presionar una negociación como trabajadores era mediante la convocatoria de huelga.

Un mes después de esta convocatoria y después de múltiples reuniones en el departamento de Trabajo con las patronales Unión Catalana de Hospitales (UCH), Consorcio de Salud y Social de Cataluña (CSC) y Asociación Catalana de Entidades de Salud (ACES), ha sido el último día laborable antes del inicio de la huelga cuando se ha firmado el acuerdo. Un acuerdo que incorpora como elemento destacable la creación de una Comisión Bilateral que se encargará de hacer seguimiento de la implantación y negociación de las mejoras y, además, creará Juntas Facultativas en los centros para decidir aspectos clínicos y de gestión.

Los aspectos que formaban parte del listado de reivindicaciones y demandas de Metges de Catalunya y finalmente se han incorporado en el acuerdo implican en el ámbito de la investigación y la formación que, como mínimo, un 15% de la jornada anual se destine a estas actividades no asistenciales. En cuanto a las condiciones laborales y retributivas, se ha eliminado el recorte salarial del 5% al ​​personal facultativo en formación (MIR) y se ha firmado que la contratación temporal represente como máximo el 8% de la plantilla de facultativos a finales de 2020. También se aplicarán cambios sobre las guardias localizadas: se incluye la retribución mínima de dos horas a precio de hora ordinaria, en caso de requerimiento de presencia. A partir de las 1.500 horas anuales de atención continuada, sin embargo, todas las guardias localizadas se abonarán a precio de hora ordinaria de trabajo. También se ha incluido el cobro íntegro como guardia presencial si se supera los 2/3 de la jornada con presencia física del profesional. Al mismo tiempo, se disminuye la exigencia del número de horas de guardia y se incrementará la retribución al personal con reducción de jornada por cuidado de un hijo o familiar.

Algunas ideas nuevas que no se habían previsto en su momento en el convenio del SISCAT respecto a las embarazadas se incorporan ahora a partir de este acuerdo. Las mejoras implican que podrán dejar de hacer guardias a partir de la 20ª semana de gestación y en la prestación por riesgo de embarazo, permiso de maternidad y lactancia natural percibirán el 100% de las retribuciones, incluida la media de las guardias realizadas en los últimos 12 meses.

En cuanto a la atención primaria concertada, se ha establecido una media de 1.300 pacientes asignados por médico de familia “para alcanzar un nivel óptimo de 25-28 visitas diarias” y se han establecido como referencia temporal 12 minutos por visita presencial y seis minutos por visita telefónica o virtual. Estas mejoras, para Metges de Catalunya, son “determinantes”, ya que equiparan las condiciones asistenciales a las de la Atención Primaria del ICS.

Estos acuerdos responden a muchas de las demandas que el sindicato había listado. De hecho, las demandas de esta nueva huelga daban continuidad a las que se generaron durante la huelga que se dio del 26 al 30 de noviembre . Aunque tarde, el sindicato co nsidera que el documento de entendimiento de las partes es  “doblemente significativo”  porque, además de las reivindicaciones alcanzadas,  “supone la certificación que los facultativos requieren de un espacio propio de negociación”, es decir, la Comisión Bilateral.

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