¿Por qué sigue siendo un tabú la menstruación? ¿Por qué sigue siendo, a menudo, motivo de burla y de chistes, de silencio y secretismo? Estas y otras preguntas son las que plantea Red Cunt, reconsidering periods, un documental que rompe con el oscurantismo y denuncia los estigmas que todavía sufren las mujeres en torno a un proceso biológico y natural como es la menstruación.
La directora leridana Toni Baches, afincada en Alemania desde hace 30 años, tuvo la idea de hacer Red Cunt cuando se planteó hablarle a su hija sobre la regla y no encontró nada positivo para decirle. “Muchas veces sólo vemos la parte negativa. Sabemos que tener la regla es un ‘palo’ y que a muchas mujeres les provoca dolor, pero me sabía muy mal sólo poder transmitirle a mi hija cosas negativas sobre la regla. Así que empecé a buscar proyectos de personas y colectivos que lucharan contra el tabú de la menstruación y salió un amplio abanico. Éste ha sido el punto de partida del documental”, explica Baches.
El filme empieza con una escena inspirada en una visita a la pediatra con su hija. “La pediatra le dijo que se preparara, porque que pronto le vendría la regla, y que se escondiese unas compresas en el fondo de la mochila por si le venía. Al salir, mi hija me preguntó por qué debía esconderse las compresas En ese momento, me di cuenta de que yo tenía el tabú de la regla tan interiorizado que no vi que no estaba bien que se escondiese.Ella, que no estaba contaminada con ese tabú, sí lo vio. pensar: tengo que replantearme las cosas, porque no quiero pasarle todos esos tabúes a ella”, señala la directora.
La película, pues, busca establecer diálogos y debates para reconciliarnos con la menstruación y poner fin a los tabúes y estigmas que le rodean. “La intención es quitarnos esta vergüenza de encima. Lo que quiero con este documental es poner sobre la mesa nuestros coños sangrientos, porque salimos de un coño sangriento, no de una costilla. Y una de las primeras cosas que se debe hacer para romper con el tabú de la menstruación es hablar de ello, sentencia Baches, quien también señala que el lenguaje usado en la publicidad y la industria no ayuda a romper con el estigma.
“Durante siglos, nos hemos encontrado con una definición bastante patriarcal-neoliberalista de la menstruación: la menstruación es algo sucio, que apesta, que hay que esconder. Pero no es así”, explica la directora. Y añade: “La regla es un superpoder. Es una señal de buena salud y es la primera condición para tener hijos de forma natural. No hace falta romanizarla pero, si queremos, le podemos encontrar alguna parte positiva”.
La obra combina imágenes de animación con conversaciones reales con activistas y miembros de colectivos que luchan contra los tabúes que persisten en torno a la regla. Una de las personas que aparecen en el documental es el del escritor y activista trans Ian Bermúdez, que relata su experiencia con la menstruación después de la transición. Bermúdez explica cómo, a diferencia de lo que le recomendaban los médicos, decidió mantener la regla durante la transición. Baches señala que tomó la decisión de incluir en la película a un activista trans para romper con el binarismo entre hombre y mujer. “Quiero que con la película se identifique a mucha gente, y el binarismo me parecía demasiado corto de miras. Mi hija va a un instituto donde hay personas trans, y pensé que estas personas necesitan referentes y quizás no los tienen”, explica la directora de Red Cunt.
La película, que se rodó entre Hamburgo, Kiel, Berlín y Barcelona, se estrenó el pasado 27 de mayo, en el marco del Día Internacional de la Menstruación. Lo que no estaba previsto era que justamente el tema de la menstruación estaría en el punto de mira del debate político y social, con la inclusión de las bajas por dolores menstruales en la futura reforma de la ley del aborto.
“Esta ley es muy necesaria, pero debemos considerarla como un primer paso, no como una victoria. La ley debe ser un empujón para una mayor investigación en cuestiones relacionadas con la salud de las mujeres, porque la menstruación no debería provocar dolor. Es necesaria más investigación en enfermedades como la endometriosis, que provoca fuertes dolores menstruales y que tarda, de media, ocho años en diagnosticarse”, señala Baches. Según la directora de Red Cunt, si los hombres tuvieran la regla, la situación sería muy distinta: “Los productos por la menstruación serían gratuitos y habría mucha más investigación y empatía”.
El documental ya ha podido verse en cines de Madrid, Lugo, Valencia, Bilbao y Vitoria, entre otros, y estos días se puede ver también en los Cines Girona de Barcelona. Además, también se están preparando proyecciones especiales en centros educativos. Red Cunt es la primera parte de una trilogía sobre grandes tabúes: la seguirán Hot Cunt, sobre la masturbación, y Silver Cunt, sobre la menopausia.
