Batman y el arte de la adaptación

Hubo una época en que los aficionados al cine fantástico y a la lectura esperábamos con ansia las adaptaciones al cómic de los éxitos en la pantalla grande. Seguramente, esperábamos ver algo más de lo que aparecía en la película (ya os digo que, por un tema de número de páginas, lo normal era «algo menos»), o, sencillamente, seguir disfrutando de la historia en otro formato con sus propios códigos. Pero a veces… ¡ay, a veces! A veces la adaptación al cómic era una obra maestra gracias al talento de sus autores, sean por los guionistas, los dibujantes, los entintadores o los coloristas, o por todos ellos.

Al ser una adaptación de una película, la libertad creativa tiene sus limitaciones, por eso destacaban aquellas obras en las que se podía vislumbrar la aportación y el talento de los autores, tanto en el dibujo, en la composición de la página, en el color y en el devenir de la trama. Como muestra un botón: Alien, el octavo pasajero. La historia ilustrada (Alien: The Illustrated Story, 1979), de Archie Goodwin (guion) y Walter Simonson (dibujo, tinta y parte del color); Atmósfera Cero (Outlander, 1981), de Jim Steranko; Dune (1984), de Ralph Macchio (guion) y Bill Sienkiewicz (dibujo); Drácula de Bram Stoker (Bram Stoker’s Dracula, 1993) de Roy Thomas (guion), Mike Mignola (dibujo), John Nyberg (tinta) y Mark Chiarello (color), entre otros. (Nota: todos los guiones de estos cómics son en realidad adaptaciones, en este párrafo no he acreditado en los cómics a los guionistas de la obra original).

La lista es larga. Y se publicaron auténticas joyas que aún hoy en día recordamos como obras destacadas en la historia reciente del cómic de las últimas décadas. Ahora, probablemente, es más difícil sorprendernos por la cantidad de impactos que tenemos continuamente, no tanto por su calidad porque algunas adaptaciones actuales son realmente excepcionales. Pero la realidad es que si tenéis alguno de los títulos citados ya podéis pensar que tenéis un gran tesoro en casa. Y algunas publicaciones son realmente difíciles de encontrar hoy en día… pero no todas.

ECC Ediciones publica en un único volumen integral las adaptaciones en cómic de las cuatro míticas películas de los noventa del personaje de Batman: Batman (1989) y Batman vuelve (Batman Returns, 1992), dirigidas por Tim Burton; y Batman Forever (1995) y Batman y Robin (Batman & Robin, 1997), dirigidas por Joel Schumacher. Esta edición sublime es una de las novedades destacadas de la editorial coincidiendo con el conocido como #BatmanDay y que este año se celebra el sábado 17 de septiembre de 2022.

El 12 de junio de 2013, las multinacionales DC Comics, Warner Bros y DC Entertainment decidieron celebrar el Superman Day aprovechando que ese día era el estreno de la película El hombre de acero (Man of Steel, 2013), dirigida por Zack Snyder, justamente en el año que el personaje celebraba setenta y cinco años desde su primera aparición. La iniciativa de dedicar un día al personaje, desde una perspectiva de comunicación global, tuvo un éxito rotundo y, por ello, se sigue celebrando desde entonces esa conmemoración en esa misma fecha.

Si la primera aparición del primer superhéroe fue en el primer número de Action Comics el 18 de abril de 1938, solo pasaron pocos meses hasta la aparición de Batman en un cómic, en concreto en el número 27 de la cabecera Detective Comics (cuyo acrónimo dio origen al nombre de la editorial estadounidense), el 30 de marzo de 1939, creado por Bob Kane y Bill Finger. Así que, después del éxito del año anterior, en julio de 2014 se celebró el Batman Day coincidiendo con la celebración de la Comic Con de San Diego, sin duda, el evento más importante del sector a nivel mundial, dotando a los aficionados de la posibilidad de poder conocer a los autores en las sesiones de firmas y en las actividades programadas. De nuevo, tenían una excusa encomiable: 75 años de la creación del personaje. El éxito fue rotundo, lo que contribuyó a mantener esta nueva tradición desde entonces, eso sí, cambiando al siguiente año el día de celebración al tercer sábado de septiembre, donde se ha mantenido hasta la fecha, ya con actividades organizadas a nivel local y global.

El recopilatorio Batman: La saga cinematográfica (2022) comienza con las dos adaptaciones de las películas dirigidas por Tim Burton, trasladando a las viñetas el excepcional diseño de la ciudad de Gotham en la película, además de toda la parafernalia asociada al personaje, en especial ese añorado y original Batmóvil. Burton era un director con una trayectoria ascendente pero cometió lo que parecía un terrible error en ese momento, provocando que la productora recibiera más de doscientas mil cartas protestando por la elección del actor protagonista, que ya había liderado el elenco de su anterior película Bitelchús (Beetle Juice, 1988), estamos hablando nada más y nada menos que de Michael Keaton. Y sí, las redes sociales de aquella época funcionaban con papel, sobre y sello, y sí, afortunadamente, tampoco se hizo caso de lo que opinaban los aficionados a priori. Su antagonista en esa primera película fue la actriz Kim Basinger en el papel de la periodista de Vicki Vale.

Si la primera película consiguió batir varios récords de recaudación, su adaptación al cómic fue un gran éxito de ventas, una obra destacada durante semanas en la lista de las más vendidas en el New York Times. Pero, sin duda, se convirtió en una gran oportunidad de atraer a nuevos lectores que no conociesen el personaje, proponiendo un viaje maravilloso del cómic al cine y, de vuelta, al cómic o, directamente, del cine al cómic, espolonados por el éxito del largometraje. Y los nuevos lectores no quedarían defraudados, puesto que gran parte del revulsivo que llevó de nuevo a Batman al cine llegó por el gran éxito de los cómics de la década de los ochenta, donde destaca especialmente la obra maestra que supone Batman: El regreso del Caballero Oscuro Batman. The dark Knight Returns, 1986), de Fran Miller, convertido en todo un fenómeno editorial hasta nuestros días, revolucionando el sector del cómic en todos los sentidos desde entonces.

La edición de La saga cinematográfica cuenta con un prólogo escrito por Akiva Goldsman, que fue el guionista de la tercera y cuarta película de la saga, Batman Forever y Batman y Robin. Los aficionados al fantástico conocemos bien su trayectoria como guionista, director y productor de títulos emblemáticos en de la saga Star Trek o adaptaciones de libros de Stephen King o, también, adaptaciones de diferentes cómics como Jonah Hex, Los perdedores o la más reciente serie de Titanes, una historia protagonizada por superhéroes del universo DC, donde volvió a coincidir con el personaje de Batman, con un diseño de personaje diferente de su trabajo anterior para la pantalla grande.

En su prólogo, Goldsman destaca una característica fundamental del personaje de Batman: su maleabilidad. Esta cualidad asociada a los metales es una metáfora ideal para comprender la capacidad del personaje de ser adaptado cambiando la forma, pero sin perder la identidad original. Si una amalgama es una aleación que mezcla diversos metales, de nuevo ese símil se puede aplicar a las diferentes visiones que los autores le han dado al personaje a lo largo de más de ocho décadas, manteniendo la esencia de las características originales: «Como hombre, soy de carne y sangre. Se me puede ignorar. Se me puede destruir. Pero, como símbolo puedo ser incorruptible… puedo ser eterno».

Goldsman advierte, eso sí, de una limitación fundamental que afecta a la adaptación a la pantalla grande: la dificultad de que el rostro del actor sea tan expresivo como en el cómic debido a las características de la máscara (vaya, que el traje no es tan maleable como el personaje), a lo que hay que añadir las limitaciones propias del lenguaje cinematográfico y la dirección artística. Él mismo reconoce que la solución es dotar de más protagonismo a Bruce Wayne con todo lo que ello supone (en principio, vamos al cine a ver una película de un superhéroe enmascarado), y también nos reconoce una de las especulaciones que surge a menudo en los medios de comunicación: el hecho de que los villanos sean más populares, no solo por estar interpretados por grandes actores, sino por el factor de que les vemos la cara sin máscara (a pesar del maquillaje), y su interpretación puede alcanzar cotas más altas de sofisticación.

Solo hay que recordar la lista de intérpretes en las cuatro películas, que quedaron inmortalizados en los cómics al tratar los dibujantes de que las facciones recordasen a los actores que dieron vida a dichos villanos: Jack Nicholson (Joker); Danny DeVito (Pingüino) y Michelle Pfeiffer (Catwoman); Tommy Lee Jones (Dos Caras) y Jim Carrey (Enigma); y Arnold Schwarzenegger (Sr. Frío) y Uma Thurman (Hiedra Venenosa), respectivamente en cada una de las cuatro producciones.

Los cuatro cómics recopilados en Batman. La saga cinematográfica cuenta con el siguiente arte, para cada uno de los títulos:

– Batman: The Official Comic Adaptation of the Warner Bros. Motion Picture (1989): Dennis O’Neil (guion), Jerry Ordway (dibujo) y Steve Oliff (color).

– Batman Returns: The Official Comic Adaptation of the Warner Bros. Motion Picture (1992): Dennis O’Neil (guion), Steve Erwin (lápiz), José Luis García-López (tinta) y Tom McCraqw (color).

– Batman Forever: The Official Comic Adaptation of the Warner Bros. Motion Picture (1995): Dennis O’Neil (guion), Michal Dutkiewicz (lápiz), Scott Hanna (tinta) y Adrieene Roy (color).

– Batman and Robin: The Official Comic Adaptation of the Warner Bros. Motion Picture USA (1997): Dennis O’Neil (guion), Rodolfo Damaggio (lápiz), Bill Sienkiewicz (tinta) y Pat Garrahy (color).

Por cierto, la primera vez que se pudieron ver las aventuras de Batman en el cine fue en los años cuarenta del siglo pasado. En concreto, en el serial de 15 episodios Batman (1943), interpretado en el doble papel protagonista (Bruce Wayne/Batman) por Lewis Wilson (1920-2000). Y no, no fue el primer superhéroe en llegar al cine… tampoco fue Superman. El primero fue el personaje que ahora conocemos como Shazam, un par de años antes, en 1941, pero eso es otra historia. Espero que disfrutéis del hombre murciélago en el Batman Day… este día y en el resto de noches del año.