Hace un año y medio, el 25 de marzo del 2021, el catedrático y profesor en el grado de Periodismo de la Universidad Autónoma de Barcelona accedía a la presidencia de RTVE. Con unas audiencias fluctuantes y un contexto de consenso complejo, el académico y asesor de la UNESCO tomaba un cargo crucial para el avance de la televisión pública española. Sin embargo, el declive no hizo más que acentuarse.

Las audiencias y los programas fallidos

Según datos de la agencia Barlovento, el share (cuota de pantalla) de la 1 de TVE rozó las cuotas de un 8% durante el 2021 y lo que llevamos de 2022, algo catalogado como “desastroso” por secciones de la misma cadena. En mayo, la final de la Champions y Eurovisión propiciaron un puntaje de un 9’5% de audiencia que, al mes siguiente, sin los grandes eventos, volvió a caer al 8’4%. Un reflejo de que la parrilla no consiguió enganchar a la audiencia, y es que antes del “Chanelazo” y el mayor espectáculo europeo del fútbol masculino, TVE obtuvo otro resultado nefasto de una cuota de pantalla del 8’3% en abril —que como mínimo está un par de décimas por encima del mínimo histórico mensual del 8’1% que obtuvo en junio del 2021—.

Cuando Pérez Tornero aterrizó al mando de la corporación pública, el programa “Las cosas claras”, conducido por Jesús Cintora, no llevaba ni medio año de recorrido. Si bien es cierto que no era competidor directo de los líderes indiscutibles, datos de la consultoría Dos30 indican que el formato consiguió subir en al menos dos puntos la audiencia de los anteriores programas en su franja horaria de mediodía, entre las 12h y las 15h, incluso logrando plantar cara en algún momento al García Ferreras más débil —cuyo share suele oscilar entre el 10 y 13%—.

El nuevo presidente y su consejo decidieron prescindir del formato puesto que en su etapa “el infoentretenimiento no era una apuesta”, y así fue como el contrato no se renovó. En su lugar se puso “Días de verano”, creado por el propio Pérez Tornero, y volvió a caer la cuota de pantalla a datos parecidos a los antecesores de Cintora: tan solo obtuvo un 5% de share. El día de su estreno, donde no se hizo mención alguna al programa antecesor, se promovió el hashtag #DíasdeveranoTVE. Pero la tortilla se le giró en contra.

Las redes no perdonaron y no se cortaron a la hora de tildar la nueva programación como un “Sálvame” pijo cuando precisamente el pretexto para la no renovación de “Las cosas claras” era que no casaba con el ‘plan Tornero’ para la televisión pública por su formato. El cambio de paradigma del debate político hacía un espacio con temas más livianos y casi del mundo del cotilleo, hizo que el público situara #CensuraaCintora como segundo trending topic a nivel nacional, top en el que el programa del presidente ni siquiera llegó a entrar.

Llegó el otoño, y con él, la caducidad del parche veraniego creado por el catedrático. Tras la mediocre cuota obtenida, llegaba el momento de la verdad: el 13 de septiembre de 2021 estrena “Mejor contigo”, conducido por Ion Aramendi y también creado por Pérez Tornero. El espacio, dividido en dos bloques, promedió en su primer mes de vida una cuota de 5’3% para la primera parte y un 3’6% para la segunda. Igual que “Días de Verano”, el espacio se dirigía a una mezcla de la actualidad con temas más “ligeros”, sin tantos tintes político-informativos como “Las cosas claras”. El share siguió promediando alrededor de un anodino 5% hasta que en febrero de 2022 la cadena decidió darlo por finalizado.

Las polémicas y el autoritarismo

En mayo del 2022, el Consejo de Informativos de TVE emitía un contundente comunicado sobre el comportamiento de José Manuel Pérez Tornero. El presidente llamó a la periodista Anna Bosch a su despacho, dónde bajo la presencia de un abogado —la reportera no fue informada de este hecho y apareció sin representante legal— el presidente empezó a increparla por tuits que contenían mensajes críticos con la propia televisión pública. En el encuentro menciona a otro periodista (Xabier Fortes) del que dice tener también informes y dosieres sobre sus ‘actividades’. En el comunicado, el Consejo de Informativos concluye que deben atajarse ese tipo de actitudes que van en contra de los principios democráticos del ente, además de que debe esclarecerse lo sucedido y el por qué de la existencia de informes sobre trabajadores, puesto que la etapa en la que se hacían listas negras de periodistas ya fue superada.

En la línea de este suceso, el diario Público manifiesta que uno de los motivos de la renuncia de Tornero podría venir precipitada por este mismo carácter autoritario y déspota: el medio ha hecho saber que se iban a hacer públicas acusaciones del Consejo sobre “presiones y maltrato”, en algunos casos incluso a directivos que él nombró. Además, las fuentes explican estar trabajando en un clima de “ansiedad y malas condiciones” por el control absoluto que ejerce el máximo cargo.

Las sociedades y los buenos amigos

Cuando llevaba medio año en el mando, Pérez Tornero compareció ante la Comisión de Control Parlamentario donde tuvo que dar explicaciones sobre una serie de contrataciones de dudoso rigor legal y ético.

A principios del mes de diciembre del 2021 se hicieron públicas unas informaciones en las que se apuntaba que el profesor de la Universidad Autónoma de Barcelona habría adquirido tres viviendas bajo la sociedad Gamma Media Studio, a la que pertenecía. Otra sociedad de Tornero, Mizar Media, empresa de carácter familiar en la que constó como administrador y apoderado, fue contratada diversas veces por el Gabinete de Comunicación y Educación de la UAB que él mismo fundó y lideraba según publicó el diario El Mundo. Al ser actividades promovidas por una Universidad publica, las faenas por las que se contrató desde el Gabinete de Tornero a la propia empresa, fueron dotadas de financiación pública a través del soporte de la Comisión Europea o de la UNESCO. Tras ser preguntado por Pablo Echenique en la comparecencia, el catedrático declaró que todo lo que ha hecho en su trayectoria académica ha sido ético y ha cumplido la legalidad al 100%.

Pero sus sociedades no dejaron de traer cola, y es que ese mismo diciembre, RTVE contrató a Mireia Pi como “Subdirectora del Área de Proyectos y Desarrollo”, un cargo creado por la nueva directiva y que dependía directamente del Gabinete de la Presidencia. Se abrió concurso público para el cargo, se convocó en verano y con quince de días de publicidad sobre la convocatoria. Lo ganó Pi, quien había sido investigadora del Gabinete de Comunicación y Educación de la UAB que Tornero creó, además de tener un vínculo estrecho en el ámbito empresarial: la nueva subdirectora también había sido la responsable de proyectos educativos en Mizar Media. Ante sede parlamentaria, el catedrático declaró que él no había tenido nada que ver con ese fichaje, aunque no fue el único por el que fue preguntado.

Otro caso sonado fue la contratación del “Subdirector de Estudios y Transferencia del Conocimiento”, cargo que fue para Luis Pastor, con una estrecha relación personal y profesional con Pérez Tornero. Coincidieron en la revista “Anàlisi”, y posteriormente codirigieron juntos dos sellos de la editorial de la Universitat Oberta de Catalunya: “UOC Press y Media Literacy” y la colección “UOC Press”. Además, Pastor es un habitual en “Tahina Can”, proyecto en el que Tornero consta como máximo promotor y director, y que consiste en una serie de expediciones organizadas en el marco de la enseñanza del periodismo de viajes y que se dirige y organiza desde el Gabinete de Comunicación y Educación de la UAB.

Los juegos de poder y las tendencias conservadoras

En su carta de dimisión, Pérez Tornero declara que ya es imposible “alcanzar consensos transversales”. La pérdida de confianza del propio Consejo, además de la disconformidad del gobierno de coalición con la deriva de la televisión pública, serían los mayores factores que han contribuido a esta dimisión. Declara el ahora expresidente en la carta que en su mandato se ha “contribuido al diálogo sereno, respetuoso e informado; a hacer avanzar un periodismo de calidad propio de RTVE, introduciendo más contextualización y análisis”, sin embargo, los miembros del Consejo propuestos por Podemos, Roberto Lakidain y José Manuel Martín Medem, no estarían conformes.

Elaboraron un informe en el que analizaban la prevalencia de las tendencias políticas en la cadena. Centrándose por ejemplo en el programa “La Hora de la 1”, más de la mitad de los tertulianos pertenecerían a una ideología de derechas (57%), un 13% al centro y un 30% progresistas. Más allá del informe, hay algunos nombramientos polémicos, como el de José Juan Ruíz, quien estuvo presente en la reunión donde se increpó a Anna Bosch. Era llamado “presidente en la sombra” por su gran poder como director de Gabinete de Presidencia de RTVE con el que muchos sectores de la televisión no se sentían cómodos, y es que era conocido su estrecho vínculo con los gobiernos del Partido Popular. Ha presentado su renuncia al cargo horas posteriores a la de Pérez Tornero.

Las Consejeras propuestas por el PSOE, Elena Sánchez y Concepción Cascajosa —cuyos nombres suenan ahora para la sustitución en el cargo—, también han sido críticas con la tendencia y gestión de Tornero al frente de RTVE. Según El Español y diversos medios, entornos cercanos a ese sector del Consejo declaran que todo y contar con mayoría de miembros asignados por los partidos de izquierdas, se convirtió en un órgano “conservador”, “muy influido” por la derecha.

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