¿Cómo es la situación actual de la atención primaria?
La atención primaria debe ser la puerta de entrada al sistema sanitario. Debe tener capacidad para resolver muchos problemas y, claro, ahora la población es cada vez mayor, más envejecida… Tienen más necesidad de asistencia por parte de la atención primaria. Esto colapsa las consultas y no llegas a toda la actividad que debes realizar. La atención primaria debería tener un porcentaje muy elevado de recursos.
Nos dedicamos a la prevención y la promoción de la salud: prevenir, para evitar la enfermedad, y, claro, en este momento estás atendiendo a mucha enfermedad y te queda poco margen para hacer toda la prevención y la promoción de la salud que debería hacerse. Este problema lo arrastramos desde la crisis de 2008, que ha dejado mucha cola. Se recortaron muchos profesionales, se han ido ampliando, pero se va a un ritmo que no se llega, a la mínima que aumenta la actividad por algún motivo, ya se desborda todo porque no hay capacidad de drenaje.
Otro tema que afecta a la atención primaria son las listas de espera en los hospitales, ya que esto supone más visitas porque no puedes darle salida a aquella persona que tiene la molestia o problema de salud.
Este problema lo arrastramos desde la crisis de 2008
¿Y en cuanto a la enfermería en concreto?
A nivel de enfermería, estas carencias se notan mucho, ya que fue un sector donde se recortó mucho. Estamos infradotadas. En el caso de la atención primaria hace falta muchas más enfermeras debido a que la actividad consiste en promoción y prevención en la salud, que es una de las tareas clave de la enfermería: seguimiento de patologías crónicas, cuidados de las personas (tanto de la enfermedad como de seguimiento).
Desde la pandemia se incorporó más personal porque se vio la necesidad, y también se han incorporado otros perfiles como higienistas dentales, nutricionistas, fisioterapeutas… Todo esto está muy bien pero no se ha reforzado la base, se ha hecho muy poco en comparación con lo que debería haberse hecho. Se deben aumentar los ratios para que se pudiera dedicar el tiempo al trabajo con la comunidad.
¿Qué debería reforzarse para mejorar las condiciones laborales?
En cuanto a condiciones, con el convenio [III Convenio SISCAT ] se ha mejorado, ahora el Departamento de Salud está por la labor de equiparar a todos los profesionales, sean de ICS o no. Todavía existen diferencias notables con las que están por el SISCAT. Las diferencias de condiciones laborales entre los servicios generan cierta competencia. En el último plan del Departamento la intención es la equiparación, ahora falta ver que esto sea una realidad. Respecto a condiciones, otro tema es el que comentaba de las ratios, hay pocas enfermeras por todo lo que se debe hacer, estamos atendiendo sólo a la enfermedad como tal y esto va en detrimento de las actividades de prevención y promoción de la salud que deberíamos poder hacer. En el sector de la enfermería, también cabe mencionar que otro problema es el del reconocimiento de las categorías, que no se está llevando a cabo.
En el último plan del Departamento la intención es la equiparación, ahora falta ver que esto sea una realidad
¿Qué ocurre con las categorías?
Por un lado, está el reconocimiento de la categoría profesional y por otro el reconocimiento de la especialidad. Ya lleva más de 10 años la especialidad, hay enfermeras que son especialistas y actualmente optan a los mismos puestos de trabajo que una enfermera generalista.
Hay que empezar a trabajar porque esa situación no puede ser. Hay un plan de formación, se está invirtiendo un dinero que no está revirtiendo a la comunidad. En teoría esto se debe solucionar también con el plan, lo tienen contemplado, esperamos que se haga rápidamente porque con las oposiciones del ICS de 2018 enfermeras que llevaban décadas en la atención primaria se han visto debiendo escoger plaza en un hospital porque la convocatoria era única. Se creó la especialidad y por otra parte se unificaron las convocatorias. Estamos yendo en direcciones totalmente opuestas.
Se está invirtiendo un dinero que no está revirtiendo en la comunidad
La medicina debe ser más especializada porque la atención primaria es muy compleja: se atienden a muchos problemas de salud que antes no tenía, y eso requiere una formación específica. No puedes venir sin una formación básica en atención primaria porque necesitas un proceso. Y hasta que esa enfermera, si empieza a trabajar en la atención primaria, hasta que te da una atención de calidad que se pueda equiparar a una residente, pasan más de dos años. Hay un proceso de formación del que salen las especialistas con unas competencias muy bien trabajadas y muy bien definidas.
Las enfermeras sois también facultativas, ¿se sienten reconocidas como tales?
Ya hace muchos años que somos facultativos. De hecho, es un término que se utiliza sólo por los médicos cuando no es así. Esto debe reconocerse en este convenio y no se ha reconocido. Relacionado con ello, hace falta más liderazgo de enfermero en los centros: somos el colectivo con mayor volumen y en porcentaje ocupamos muy pocos puestos de decisión.
Al respecto, Médicos de Cataluña presentaba una demanda que se ha resuelto con la cancelación del nombramiento de dos enfermeras como directoras de dos centros sanitarios…
Hace años que en las direcciones hay enfermeras. No son muchos, debe aumentarse el número de profesionales de enfermería en direcciones y lugares de decisión porque se debe tener visión global de todo el sistema. Los facultativos médicos tienen una parte de la visión y las enfermeras otra: una visión global de la persona, no estamos formadas sólo por la enfermedad, sino también por todo lo que implica la atención a la persona. Con esto entra el contexto de la familia, socioeconómico… debes tener en cuenta todo este abanico que acompaña a la persona.
No estamos formadas sólo por la enfermedad, sino también por todo lo que implica la atención a la persona
Los profesionales de Medicina no lo han estudiado en la carrera, han estudiado la enfermedad. Esto es muy importante, porque debes tener en cuenta toda esta parte a la hora de ofrecer unos cuidados. Por ejemplo, un diabético debe hacer una dieta, tú le pones, pero esa persona no tiene recursos para poder hacer esa dieta, o un celíaco, que los productos son más caros, o una persona que esté en paro y que tenga un problema, una depresión, otras enfermedades quedarán secundarias, porque tiene un problema más relevante en el que debe estar bien para abordar otros temas. Emocionalmente debe tenerse en cuenta, y esto debe considerarse también desde arriba.
Respecto al tema de la cancelación de los nombramientos de dos enfermeras a cargos de dirección, con todo esto digo que es una lástima este hecho, la demanda es algo que no había ocurrido en todos estos años. Y es una lástima porque deberíamos trabajar todos a una, no puede ir un colectivo por separado y velar por sí mismo. En primaria se trabaja en equipo. No podemos ir uno sin otro, y debe pensarse en la globalidad de los profesionales: administrativos, medicina, enfermería, odontólogos, todo el mundo. Hay que pensar en todos a la hora de cualquier acción.
A raíz de las huelgas de enero, se iniciaron negociaciones. Al principio éstas fueron bilaterales, entre Médicos de Cataluña y Departamento de Salud, pero otros sectores sanitarios mostró su malestar e incluyeron al sindicato enfermero mayoritario. ¿Qué percepción existe sobre los pactos?
Cuando tú pactas el convenio es donde se debe trabajar todo. SATSE firmó y forma parte de las negociaciones. La percepción es que realmente ha habido una mejora respecto a años anteriores, pero hay muchas cosas que trabajar. Es necesaria una dotación de recursos humanos urgente, recontar: ¿Cuántos profesionales son necesarios para la atención primaria? Porque una cosa son las condiciones laborales y la otra son los recursos en general. Hay muchos centros que tienen muchos años, envejecidos, que tienen problemas de espacio. Todo esto también debe tenerse en consideración, porque al final también responde a condiciones laborales. En el plan también consta que se rehabilitarán centros, que se abrirán nuevos… tenemos que ver que todo esto se materialice. Hace muchos años que la atención primaria ha sido dejada, y se ha ido sumando este desgaste con mayor actividad. Este hecho debe visibilizarse, porque el hospital atrae más, se visualiza más, pero hay muchas intervenciones que se realizan en la atención primaria, se realizan muchas visitas, y se resuelven muchos problemas. Es necesario ponerla en valor.
Más allá del detrimento de la atención al paciente, ¿cómo afecta a la tensión constante sobre la atención primaria?
Últimamente, con todos los problemas que existen, la percepción es que la población no tiene buena opinión del sistema de salud. Antes de la pandemia ya había problemas, pero todavía arrastramos más a partir de ahí.
Después de la pandemia hemos tenido que recuperar toda la actividad de las personas con patologías crónicas y con problemas de salud, es decir, ponerte al día de todo: contactar a las personas, reanudar toda esa parte. Se ha normalizado el sobreesfuerzo, hemos normalizado ir al 150% de la capacidad, todo esto funciona gracias a los profesionales. Hay profesionales sanitarios que han visto repercutida su salud mental por ese motivo. Si estamos jodidos, ¿cómo debemos contribuir a la causa?
Ha habido muchas personas que se han ido fuera porque no tenían las mismas condiciones que los médicos. En Londres se fueron muchas, en Inglaterra, en Francia y en Alemania. Y hay enfermeros que se plantean cambiar de profesión después de todo lo ocurrido, de hecho algunos han dejado el oficio.
La percepción es que la población no tiene buena opinión del sistema de salud
¿Por dónde pasa el futuro de la enfermería en la atención primaria?
La enfermería es vocacional. Si no te gusta la profesión, no terminarás la carrera. Desde la universidad debería trabajarse más la atención primaria, debería darse más fuerza, explicarla más.
Tanto en medicina como enfermería, la gente de primeras quiere “sangre e hígado”, y no se explica bien todo lo que se hace en la atención primaria. Un problema también es la especialidad, tenemos muchas enfermeras que son de fuera del territorio catalán, vienen a formarse aquí y se marchan. Y es normal, hacer dos años de especialidad, cobrar menos y después optar igualmente a las mismas plazas de trabajo…
Todas las enfermeras de primaria deberían ser especialistas en enfermería comunitaria en un futuro, ser reconocidas como tales.