El 70% de los barrios más vulnerables del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) se concentran en el Besòs, según el último estudio sobre vulnerabilidad urbana del Institut Metròpoli. El territorio del Besòs aglutina 19 de los 27 barrios más vulnerables del AMB, más del 70%, hecho que perdura desde los años noventa. La situación se agravia en Santa Coloma de Gramenet donde la mitad de la población vive en barrios donde la vulnerabilidad urbana es extrema, seguido de Cornellà del Llobregat, Hospitalet del Llobregat y Badalona.

En el conjunto del AMB, la tendencia general es de una leve reducción de la vulnerabilidad urbana que ha pasado del 56,7% el 2015 al 55,4% el 2020. Destaca una bajada de la vulnerabilidad social, ya que hay menos población con renta baja y por una mejora en el abandono prematuro de los estudios. Aun así, hay un aumento significativo de población extranjera de origen vulnerable.

Mapa de la vulnerabilidad urbana del AMB |Institut Metròpoli

 

Parque residencial de baja calidad y un elevado número de desahucios

Los barrios con una vulnerabilidad extrema destacan por un parque residencial de baja calidad con un predominio de viviendas de entre los años 50 y 70. El año 2020 se contabilizaron 14.813 pisos destinados a políticas sociales en el territorio del Besòs, lo que representa un mínimo 1,8% del total del parque. En el eje del Besòs, muchos hogares con unos ingresos medios de 25.000 euros anuales no pueden cumplir con la regla del 30%, de lo que cobran a pagar el alquiler. En el barrio de Sant Martí se destina de media el 45%, en Sanr Andreu el 38%, en Nou Barris el 34%, mientras que en Sant Adrià del Besòs el 34%, en Montcada i Reixac el 31% y en Santa Coloma de Gramenet el 30%.

A pesar de que el Gobierno  suspendió los desahucios a los hogares con vulnerabilidad como parte del escudo social de la COVID-19, el 2020 los juzgados han ejecutado un elevado número. En los territorios del Besòs se han contabilizado 1.445 en todo el año: 1.028 han estado en Barcelona; 277 en Badalona; 68 en Santa Coloma de Gramenet y 72 entre Cerdanyola del Vallès y Montcada i Reixac.

Hospitalet y Sant Feliu del Llobregat, ejemplos de programas de mejora de barrios

El día siguiente que Pere Aragonès se comprometiera a impulsar un plan de barrios “con un marcado carácter social”, el Hub Social de la Calle Girona acogía un acto del Institut Metròpoli donde se comentaron programas de mejora de barrios con un objetivo social. Los planes tienen como ámbitos prioritarios: la educación, brecha digital y adaptación social; mejora en la formación; medidas de cohesión social y vivienda, rehabilitación y transición ecológica. Además, los jóvenes son el colectivo prioritario, a quien se dirigen el 44% de las acciones, seguido de los niños, familias y mujeres.

El último programa ha sido impulsado por el AMB con una dotación de 9,9 millones de euros y una duración de tres años. “Es el más transversal del AMB. Lo que hemos hecho es un laboratorio para ver las oportunidades y carencias de los municipios y el resto de los planes que se realizan tienen que encajarse”, afirmó Antoni Farrero, coordinador general de la Oficina Técnica de Gerencia del AMB.

En Hospitalet del Llobregat se impulsa el Plan Integral Las Planes- bloques Florida desde el 2017, que ha recibido subvenciones de la Diputación de Barcelona y el AMB. Lluís Esteve, encargado de gestionarlo afirma que en 2016 se identificó una mayor vulnerabilidad socioeconómica en el barrio de Las Planes con una carencia de servicios como espacios para jóvenes y gente mayor, infraestructuras que se establecieron como prioritarias con el nuevo plan. En una segunda fase se ha elaborado un plan estratégico para impulsar 60 acciones con la vista puesta el 2030, con proyectos como espacios de curas, para jóvenes y puntos TIC, entre otros. “La gente ve que quien antes generaba incivismo por las noches ahora los ayuda cuando tienen problemas informáticos, un ejemplo de integración laboral”, afirmaba Esteve.

En Sant Feliu del Llobregat los barrios que se han visto beneficiados por el programa de mejora de barrios han sido La Salud y Can Calders, nacidos por la migración interna y dónde actualmente hay un predominio de personas migrantes con rentas bajas y gente mayor. La población destaca por una baja formación profesional, un 10% de media en comparación al 50% del resto de la ciudad. Además, el Ayuntamiento ha identificado que es un barrio donde la extrema derecha tiene una elevada incidencia.

El año 2006 ya recibieron una subvención de la Generalitat por la ley de barrios que les sirvió para arreglar infraestructuras y la vía pública. Con la nueva subvención, el consistorio ha querido dar respuesta a una de las preocupaciones que se concentraba en las dos escuelas de los barrios, donde quedan muchas plazas libres y se han intervenido para atraer a más gente. Otro de los ejes ha sido el fomento de la red comunitaria, puesto que son barrios con pocas asociaciones y por último se han hecho programas de acompañamiento a la gente mayor.

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