Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) se encuentra en plena disputa por el liderazgo del partido tras un período de dificultades políticas debido a los resultados electorales desfavorables de mayo de 2023 y a las noticias que han destapado la existencia de una estructura B dentro del partido. Esta, vinculada con la campaña de desprestigio a Ernest Maragall y de colgar de una soga un muñeco de Oriol Junqueras en Sant Vicenç dels Horts, su localidad, está arrastrando el espacio de los republicanos en una espiral decadente de autodestrucción. Así, como resultado de este escándalo, se ha vuelto cada vez más cruda la lucha fratricida por el poder dentro de casa de un partido que, hasta hace no mucho, vivía uno de los momentos más dulces de su historia al haber conseguido la presidencia de la Generalitat con Pere Aragonès a la cabeza.

Recientemente, Oriol Junqueras acusaba directa e indirectamente a Marta Rovira —con el estilo propio de la principal figura del partido— de maniobrar a espaldas de quien era el presidente del partido mientras él estaba encarcelado por los hechos relacionados con el referéndum del 1-O. La exsecretaria general, por su parte, prefería no entrar en el barro y emplazaba su respuesta para una vez se haya celebrado el congreso que deberá decidir la nueva dirección de ERC para los próximos años. Tristemente, en el fondo, todo trata de eso: la lucha encarnizada entre diferentes facciones del partido operaba de manera subterránea cuando los resultados acompañaban, y ahora, cuando todo va cuesta abajo, todo aflora a la superficie.

Actualmente, cuatro candidaturas han mostrado su intención de presentarse al congreso del 30 de noviembre para dirigir la formación, aunque aún no se sabe si todas lograrán los avales necesarios. Hasta ahora, sin embargo, no se ha apreciado ningún debate ideológico entre las diferentes candidaturas. Más bien, la lucha se centra en ver quién es más capaz de conseguir nombres más populares, como si se tratara de ver quién logra una colección de cromos más brillante y extensa. Veremos si en los meses que vienen son capaces de articular un debate real sobre cuál es el rumbo que debe tomar ERC respecto a las dos cuestiones fundamentales del partido: el debate sobre las políticas sociales —y la forma en que se materializan en el ámbito de alianzas con el resto del espectro político —, y el posicionamiento estratégico respecto a la independencia de Cataluña.

  1. Militancia Decidim: Aunque Oriol Junqueras dimitirá después de las elecciones europeas, sigue siendo una figura central. Junqueras ha estado recorriendo Cataluña para conectar con la militancia. Está acompañado de figuras como Lluís Salvadó y Raül Romeva, y su equipo está trabajando para convencer a sectores del partido, destacando la diversidad de opiniones sobre el pacto con el PSC. Hasta ahora, es una de las dos principales candidaturas.
  2. Nova Esquerra Nacional (NEN): Conocida como la candidatura “rovirista”, se presenta como una alternativa a Junqueras encabezada por Xavier Godàs i Alba Camps. Hasta el momento, tanto la candidatura rovirista como la junquerista parecen ser las candidaturas que lideran esta carrera por el poder interno del partido. Destacan portavoces como Marc Aloy, Teresa Jordà, y Raquel Sans. Defienden un liderazgo coral y renovador, intentando evitar el personalismo, y rechazan la concentración de poder en una única figura.
  3. Foc Nou: Esta candidatura regeneradora, liderada por figuras como Alfred Bosch, critica las decisiones recientes del partido, especialmente el pacto con el PSC. Proponen una ruptura con el pasado y buscan captar el voto descontento con las direcciones anteriores. El discurso de la “renovación”, sin embargo, puede encontrar obstáculos al tener en cuenta que fue diputado de ERC en el Congreso de los Diputados entre los años 2011-2015, concejal del Ayuntamiento de Barcelona entre 2015 y 2018, y consejero de Exteriores del Gobierno de la Generalitat entre 2018 y 2020. Se retiró temporalmente de la política cuando la prensa informó de los presuntos abusos sexuales cometidos por quien era su jefe de Gabinete, Carles Garcias Hernández.
  4. Recuperem ERC: Formada por el Colectivo 1 de Octubre, que ha sido crítico con la dirección por abandonar el mandato independentista del referéndum. Sus candidatos, Xavier Martínez Gil y Ángel Ruiz, se presentan como una voz crítica que quiere devolver a ERC el espíritu del proceso independentista.

El 7 de octubre se cerrará la convocatoria oficial y el 15 de octubre se sabrá qué candidaturas llegan al congreso, mientras que el 30 de noviembre se realizará la elección. Si ninguna candidatura alcanza el 50% de los votos, se repetirá la votación.

 

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