La escritora Belén Gopegui ha cerrado las XXI Jornadas UPEC reflexionando sobre la función social de la alegría, de la que ha dicho que “es el motivo por el que somos capaces de levantarnos porque sabemos que hay cosas que tenemos que defender”. Gopegui ha hecho estas reflexiones en base a las preguntas que le ha ido formulando la periodista Helena Martín, de Crític, en una sesión titulada “Una alegría que no brota sino que es un esfuerzo a contracorriente”.

“Precisamente porque piensas que la vida puede ser fantástica es por lo que nos rebelamos”, ha dicho la escritora. Ha afirmado que la bondad es algo que suele ir a contracorriente y ha citado a Sartre para defender que “no se trata de elegir ser bueno en un mundo malo sino de elegir un mundo bueno”. Ha dicho que entiende la necesidad de reivindicar la alegría, pero ha planteado dos prudencias. Una, que no debe escupirse la propia alegría a nadie. Y la otra, que echa en falta un poco más de mal humor en las manifestaciones. “Hay que organizar la furia”, ha pedido.

Se ha mostrado partidaria de utilizar todos los medios de lucha posibles ante “la situación tan desastrosa en la que estamos” y ha alertado contra quienes optan por la inacción. “Hay una parte de rencor de clase contra el capitalismo que me parece bien. Nos ha hecho tanto daño que nos alegramos cuando funciona mal”, ha reconocido y ha expuesto sus reticencias ante muchos libros de autoayuda. Cree que la frase “no necesitas terapia, lo que necesitas es un sindicato” tiene todo el sentido, aunque ha añadido que no siempre es fácil llevarlo a la práctica.

Gopegui, cuyo último libro se titula “Te siguen“, ha considerado “siniestro” que los propietarios de las plataformas digitales dispongan de datos privados e, incluso, médicos de los ciudadanos y ha reclamado que los algoritmos en vez de perjudicar a los más vulnerables se dediquen a detectar a los multimillonarios que defraudan. Reclamó que la vigilancia se aplique a cuestiones buenas y la instalen en las salas donde se celebran los consejos de administración de las grandes empresas. Y ha acabado diciendo que se da demasiada cancha a los malistas y que somos más los que no nos gusta hacer daño. “Somos más, aunque los demás tienen más altavoz”, ha concluido.

Después de su intervención, se han entregado los Premios UPEC 2025 concedidos a personas y colectivos que trabajan por la defensa de los valores de la libertad, la paz y la igualdad, que, en esta edición, los han obtenido el Festival Internacional de Payasos de Cornellà y los dibujantes Carlos Azagra y Encarna Revuelta.

Share.
Leave A Reply