El 2 de enero el nuevo presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, le robó un titular al ministro de Educación que acababa de nombrar: la Secretaría de Educación, Alfabetización, Diversidad e Inclusión cambia de nombre, un primer paso para “formar ciudadanos para el mercado laboral “y no” mentes esclavas de dominación socialista “.
Bolsonaro
El 2 de gener el nou president del Brasil, Jair Bolsonaro, li va robar un titular al ministre d’Educació que acabava de nomenar: la Secretaria d’Educació, Alfabetització, Diversitat i Inclusió canvia de nom, un primer pas per “formar ciutadans per al mercat laboral” i no “ments esclaves de dominació socialista”.
El triunfo de Bolsonaro en Brasil corrobora el giro a la derecha que se experimenta en América Latina. Las esperanzas depositadas en los gobiernos de izquierda posteriores a la Guerra Fría ha terminado en muchos casos en frustración. Aunque el asentamiento de mejoras sociales, la tentativa de forjar el socialismo del siglo XXI desde Latinoamérica se ha visto frustrada con la llegada de líderes populistas y conservadores
Aunque las encuestas les estén dando porcentajes mínimos de voto, el “momento Vox” coincide a escala internacional con movimientos importantes de la nueva derecha. Esta “internacional reaccionaria” está confrontando de forma explícita con el único movimiento que actualmente se está colocando a la misma escala: el movimiento feminista

