¿El “malismo” es la antítesis del “buenismo” o habría que hacer algunos matices? Habría que hacer matices, porque lo que…
extrema dreta
Siempre he creído que el mejor no es aquel que gana, sino aquél que sabe perder, algo que parecer ser…
De las elecciones generales celebradas este domingo 23 de julio en España, los titulares de medios nacionales e internacionales subrayan…
Desde que Vox irrumpió en la política española, y más concretamente en la andaluza, una de sus obsesiones han sido las televisiones…
Los derechos de las personas LGTBI están en peligro en Hungría. El gobierno ultraderechista de Viktor Orbán ha elegido las…
Cuando ejercía de periodista, y un tema me llamaba especialmente la atención, acostumbraba a construir una red gráfica de interconexiones.…
La verdad es que Aliot, nacido en Toulouse hace cincuenta años y actual diputado en París, ha tenido todas las…
No podemos banalizar el fascismo, pero hemos de tener las alarmas bien encenidas cada vez que detectemos las brasas de aquellos viejos tiempos. Para que nunca puedan volver
No podem banalitzar el feixisme, però hem de tenir les alarmes ben enceses cada vegada que detectem les espurnes d’aquells vells temps. Perquè mai no puguin tornar
El evidente intento de transformación de la extrema derecha y la derecha populista para reubicarse en el panorama político actual les ha llevado a penetrar en ámbitos hasta hace pocos años impensables: el ecologismo, la ocupación o el anticapitalismo. Pero en España el peso de la tradición católica se convierte en un lastre para ellos. Así, el proceso transformador de la extrema derecha española resta inconcluso precisamente por estos arrecifes heredados del pasado que impiden su equiparación con los homólogos europeos

