El nivel de comprensión lectora del alumnado de cuarto de primaria (9 años) en Catalunya se hunde hasta quedar entre los últimos del Estado. Solo Melilla y Ceuta quedan por detrás.
Así lo indica el informe PIRLS 2021 (Estudio Internacional de Progreso de Comprensión Lectora) en los datos desglosados por comunidades autónomas hechas públicas este lunes, que sitúa a Catalunya en 507 puntos, mientras que la media española es de 522, la de la Unión Europea es de 528 y la de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) es de 532.
En comparación con los datos del estudio anterior, de 2016, Catalunya ha disminuido 15 puntos y España ha caído siete puntos, una bajada que el estudio atribuye, en parte, a efectos de la covid-19. “Podría ser consecuencia del impacto que la pandemia ha tenido sobre el normal funcionamiento de los centros escolares y, en consecuencia, sobre el proceso de aprendizaje”, remarca PIRLS. El confinamiento y el cierre de los centros escolares estarían entre las principales causas de la caída del rendimiento académico.
De las nueve comunidades autónomas analizadas, las mejores puntuaciones son las de Asturias (550), Comunidad de Madrid (539) y Castilla y León (538), seguidas de Navarra (524), Andalucía (523) y Canarias. A la cola de la clasificación se sitúan, además de Cataluña (507), Melilla (498) y Ceuta (496).
El alumnado catalán, un curso por detrás del asturiano
La Asociación Internacional para la Evaluación del Rendimiento Educativo (IEA), que elabora PIRLS, establece que una diferencia de 40 puntos equivale a un curso escolar, de forma que el alumnado catalán iría un año por detrás del asturiano.
En general, la bajada es común y Madrid es la segunda comunidad que más empeora su rendimiento, con 10 puntos menos, mientras que Castilla y León ha bajado 8. El Principado de Asturias sí que ha aumentado 2 puntos.
A nivel internacional, despuntan Irlanda (582), Irlanda del Norte (573), Gran Bretaña (561) y Croacia, mientras que a la cola encontramos Francia (510), la Bélgica flamenca (510) y la Bélgica francófona (492).
La infancia más vulnerable
Tras conocer los resultados del informe PIRLS, la Fundació Bofill ha destacado que se trata de unos datos preocupantes: “La diferencia en los resultados entre los niños más y menos vulnerables se mantiene alrededor de 50 puntos en Catalunya; una diferencia que significa más de un curso de escolarización. La desigualdad en los resultados por razones socioeconómicas en Catalunya es inferior que en otros países, pero no se ha reducido en los últimos 5 años”.
La Fundació Bofill ha remarcado que es urgente que el Gobierno catalán impulse políticas directamente dirigidas a mejorar la lectura durante las vacaciones para el alumnado más vulnerable, entre las cuales ha citado la apertura de bibliotecas públicas y la programación específica de actividades orientadas a la reducción de la pérdida de aprendizajes producida durante el verano.
En este sentido, la entidad, a través de su programa Lecxit y con el apoyo de Abacus y en colaboración con la Red de Bibliotecas Públicas, lanza por cuarto año consecutivo la campaña ‘Ganemos un verano lector’ con el objetivo de animar a la infancia en situación de mayor vulnerabilidad social a leer durante las vacaciones.
Mejorar el hábito lector
Por su parte, la Conselleria de Educación ha explicado en un comunicado que pone en marcha una serie de medidas para aumentar y mejorar el hábito lector del alumnado, para que mejore de adquisición y el uso de información.
Así, dentro del Plan de Mejora de las Bibliotecas Escolares, estrenará un plan piloto en 50 centros con dotación intensiva de recursos: económica, formación, software y acompañamiento profesional, así como un plan de impulso en 200 centros: software de gestión, plataforma de lectura digital, trabajo en red y detección de buenas prácticas.
Además de fomentar las bibliotecas escolares, se implementará metodología de mejora de la lectura en los centros y se favorecerá la implicación de las familias. En el nuevos currículums habrá 30 minutos diarios de lectura a primaria, y un espacio semanal de lectura en todos los cursos de la ESO.
También se quiere poner en marcha una campaña para fomentar la lectura a casa entre las familias, teniendo en cuenta que la lectura en voz alta a casa u otras actividades de lectura mejoran notablemente los resultados en comprensión lectora y en competencias básicas.
Estas actuaciones se enmarcan en el Plan Nacional del libro y la lectura, que se presentarán próximamente junto con el Departamento de Cultura y para cuya elaboración se ha contado con la participación de diversos agentes del sector, como libreros, editores, bibliotecas o entidades pedagógicas.
Catalunya Plural, 2024 
