La Feria de la Economía Solidaria de Catalunya (FESC) ha cerrado sus puertas con un balance positivo, según sus organizadores: más de 11.000 visitantes, un gasto de 27.000 Ecosoles, la única moneda en que se han podido hacer pagos; el Ecosol tiene el mismo valor que los euros. Además, la feria ha tenido un fuerte impacto en las redes sociales. Estos son algunos de los elementos destacados de la edición de este año que, en el lado negativo ha tenido las inclemencias meteorológicas que han afectado a la presencia de visitantes.

La edición de la FESC de 2018 ha supuesto un incremento del 25% de la superficie de exposición respecto del año anterior. Unas 200 entidades han participado en el evento. Además de la exposición de los bienes y servicios que ofrecen las entidades de la economía social, en la feria se han hecho unas 80 charlas.

En mayo del 68 de París ha sido el hilo conductor de muchas de las actividades, que se han hecho con el lema: “D’aquelles llambordes, aquestes alternatives”, una forma de vincular la revuelta hace 50 años con los proyectos y transformaciones que inspiran la economía solidaria en sus diferentes formas.

Como es habitual desde hace algunos años, en la FESC han participado delegaciones internacionales, en este sentido, Colombia, Alemania y Marruecos han sido algunos de los países presentes en el evento.

Durante la FESC se ha presentado el Informe de Mercado Social 2017, una radiografía del estado de la economía social y solidaria en Catalunya. El documento afirma que la Red de Economía Solidaria (XES) y las más de 200 entidades que forman parte, demuestran que la Economía Social y Solidaria crece en Catalunya y se configura como una alternativa al modelo capitalista. En 2017, las entidades que son socias de la XES ocuparon casi 6.100 personas, frente a las 4.200 de 2016, y facturaron 213 millones de euros. El impacto social que genera su actividad, además, implica a 230.000 personas. Los datos recogidos – y gracias también a los registros históricos, desde 2012 – permiten afirmar que una entidad miembro de la Economía Social y Solidaria ocupa, en promedio, 23 personas trabajadoras (3 más que en el año anterior) y factura 800.000 € (50.000 més del que facturava fa dos anys).

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