Pixabay

Esta semana se celebra el día internacional de la Salud Mental, un día en el que todo el mundo cesa para colgar en redes sociales su apoyo a esta causa. Las redes se inundan de posts, likes, tweets y reels para exponer que la salud mental es salud y que, sin ella, no se puede avanzar dignamente en el transcurso de la vida.

Son muchos los y las influencers que tienen marcada la fecha en rojo para, supongamos que con toda la buena fe, lanzar a sus followers un mensaje de apoyo, de red y de reivindicación a la normalización de las enfermedades de Salud Mental; enfermedades que muchos de estos influencers sufren y que, como ellos bien dicen, han sido agravadas por el uso de las redes sociales, la sobreexposición y la presión estética que sufren constantemente.

Sin embargo, no es tarea complicada indagar en el perfil de estos mismos influencers y encontrarse, entre tanto filtro, con un contenido totalmente distinto al que reivindican el día de la Salud Mental: fotos retocadas, cuerpos modificados, operaciones estéticas, caras de porcelana, anuncios de bálsamos que eliminan el hambre, dietas extremas, toxicidad normalizada y, como consecuencia, llantos desconsolados.

¿Hasta qué punto tienen responsabilidad estos influencers para con la Salud Mental de todos sus fieles seguidores? Vivimos en una sociedad superficial, donde los likes, la eliminación de las imperfecciones y los cuerpos normativos tuneados son la norma, son lo correcto, son lo que hace feliz a una gran parte de la sociedad.

Las redes sociales han llegado a su punto más álgido, al punto más álgido en cuanto a destrucción de la Salud Mental. La imposición de unos cánones de belleza irreales hacen que, actualmente, en España haya más de 400.000 personas jóvenes diagnosticadas con un TCA y que, dichos trastornos, hayan aumentado un 15% en menores de 12 años, especialmente entre las mujeres y las niñas.

Así pues, ¿qué responsabilidad tienen los influencers que proliferan los cánones de belleza irreales así como las redes sociales que dejan impunemente postear la modificación de la realidad? Aun sabiendo que dichos influencers también son víctimas de la violencia estética, de la sobreexposición, de los haters y de un acoso difícil de gestionar, si no hacemos un intento colectivo por empezar a construir unas redes sociales puras, limpias, donde la imperfección sea lo likeable, sea lo trend; difícilmente vamos a poder ver reducidas las cifras que demuestran que estamos ante una de las mayores crisis de todos los tiempos: la crisis de la salud mental.

Son muchas las personas jóvenes que sufren en silencio, entre post y post, problemas severos de Salud Mental que no han sabido verbalizar; por eso mismo, todas las personas, como colectivo, tenemos una pequeña responsabilidad para con la lucha real de la Salud Mental. Dejémonos de posts impostados el día de la Salud Mental y empecemos, poco a poco y diariamente, a aportar nuestro granito de arena para hacer un mundo digital en el que vivir valga la pena.

Share.

3 comentaris

  1. A prevaricar y a robar a tu puta casa on

    Eres una absoluta sinverguenza andaros con ojo que lo que haceis es delito.
    Vosotros los togados vais a pagar con carcel PPR lo que habeis hecho y estais haciendo el violar la ley no os va a salir gratis.

  2. A prevaricar y a robar a tu puta casa on

    La justicia social es violar el ART 14 y el inventarse leyes criminales como las de la de delincuencia organizada las de genero y las de si me cago en tu pm Irene Montero ¿no? con la que podeis robar, acosar, extorsionar, secuestrar y prevaricar ¿verdad? ¿De que derechos de las mujeres habla vd pedazo de estafadora? Vds no son licenciados en Derecho sino en cohecho, no defienden el Derecho lo destruyen. Vds van a acabar procesados.

    Por cierto la falsa manada fue un fraude judicial y vais a pagar por ello no os vais a ir de rositas os estais pasando de listos y habra consecuencias no le quepa a vds la menor duda. Se os acabo el chollo letardos y magistardos. Cuando hay daño hay delito y el daño que estan haciendo vds lo pagaran.

  3. Interesante; solo que la salud mental no atañe solo a cánones de belleza, filtros y demás; el problema es más de fondo, empezando por las diferentes personalidades no reales que muchos asumen en dichas redes. Los temas son infinitos…