Los funcionarios tendrán un nuevo sistema de evaluación obligatoria con la entrada en vigor de la nueva Ley de Función Pública que pretende “modernizar la Administración Pública”. Varios aspectos de la nueva ley se habían negociado ya con los sindicatos en la última legislatura, aunque el anteproyecto decayó por la convocatoria anticipada de las elecciones generales. Según Hacienda las evaluaciones se plantearán “en positivo” con el objetivo de “mejorar la productividad del servicio público”.
No se perderá la condición de funcionario
Según el BOE, las evaluaciones tendrán efectos en “la continuidad en el puesto de trabajo”, aunque desde Hacienda ya han avanzado que en ningún caso supondrá la pérdida de la condición de funcionario. Se habla de puesto de trabajo o de tareas específicas a desarrollar. Desde el Gobierno insisten en que la orientación de las evaluaciones es “en positivo” y en caso de no superarlas se fomentarán nuevas medidas de formación para mejorar el rendimiento y proporcionar nuevas herramientas para ser más eficientes. El sistema de evaluación se había acordado ya con CCOO y UGT en la última legislatura.
En caso de que se superen, se plantearán beneficios para los trabajadores en diferentes variables como la remuneración de un complemento salarial, que será una adaptación del de productividad. Las evaluaciones también se tendrán en cuenta por la promoción dentro del sistema funcionarial o para aplicar a otros puestos de trabajo.
Una de las novedades es la carrera profesional horizontal, que pretende “mejorar las condiciones” de los trabajadores públicos “sin cambiar de puesto de trabajo”. Se desarrollará un modelo que permitirá ascender en tramos y se valorará la trayectoria, evaluaciones, formación y participación en actividades de docencia o investigación. El progreso en la carrera horizontal también se verá reflejado en un complemento de carrera. Otro de los objetivos de la evaluación, según la ley, es la identificación de nuevas necesidades formativas.
¿Cuándo se empezarán a cobrar los complementos?
Aunque la ley ya ha entrado en vigor, tendrán que esperar dos años para que las evaluaciones tengan un impacto en los complementos salariales, la progresión en la carrera profesional, en la continuidad en el puesto de trabajo o en la valoración de las necesidades formativas de la plantilla.
Más agilidad en la contratación pública
El Gobierno saca pecho con la nueva ley que “impulsará un modelo más ágil y eficiente” en la selección de trabajadores públicos. Por eso establece que la publicación de convocatorias deberá ejecutarse en un máximo de dos años y el proceso de oposición no podrá durar más de un año. Se prevé la creación de un directorio para facilitar la gestión de talento interno de inscripción voluntaria. También se establece que la Secretaría de Estado de Función Pública convocará concursos unitarios abiertos y permanentes para incluir puestos de trabajo vacantes en los distintos ministerios.
“Sorpresa” entre los sindicatos
Los sindicatos aseguran que la aprobación del real decreto les ha pillado por “sorpresa” y se cuestionan si podrán introducir modificaciones. Desde CCOO critican el endurecimiento “excesivo” del régimen disciplinario mientras que desde UGT avalan la novedad de la carrera horizontal que “favorecerá las expectativas de trayectoria profesional, sin cambiar de puesto de trabajo”. Desde la Central Independiente y de Funcionarios (CSIF) también piden negociar la letra pequeña de la iniciativa.
Catalunya Plural, 2024 
